¿Alguien te ha dicho alguna vez que te pareces a tu madremamá o papá?
De vuelta en la escuela, aprendimos que mucho de lo que somos está formado por nuestros padres a través de algo llamado genética.
Nuestros ojos, nariz e incluso parte de nuestra personalidad se reduce a nuestros genes.
Si alguna vez te has preguntado si heredaste el acné de tus padres y qué puedes hacer al respecto, ¡sigue leyendo!
El vínculo entre el acné y la genética
La respuesta corta es sí, el acné tiene un componente genético.
Pero la conexión no es una línea recta y clara.
Verá, hay cuatro procesos clave que conducen a la formación de acné1:
- Mayor desprendimiento de células de la piel que causan poros obstruidos
- Aumento de la producción de sebo
- Colonización de los folículos por la bacteria Propionibacterium acnes
- Mecanismos inflamatorios complejos
Si bien no hay un gen específico que cause el acné, la investigación ha demostrado que sus genes pueden influir en sus posibilidades de tener acné. Esto podría deberse a que nuestros genes pueden controlar los procesos anteriores en nuestros cuerpos y, a su vez, hacer que nuestra piel sea el hogar ideal para las manchas.
Veamos algunos estudios
#1 Una revisión sistemática de 2020 observó una fuerte asociación entre los antecedentes familiares y el acné2. Esto significa que si tus padres tienen acné, es más probable que tú también lo tengas.
#2 Al observar el ADN de 26 722 personas, los científicos encontraron variaciones genéticas en 15 regiones del genoma que eran más comunes en personas con acné severo. Muchas de las variantes genéticas descubiertas influyen en la formación de folículos pilosos, lo que significa que esto podría ser un gran factor de riesgo para desarrollar acné3.
#3 En un estudio sobre antecedentes familiares, los investigadores descubrieron que tener un familiar de primer grado (padres, hijos y hermanos) con acné aumenta su riesgo de contraerlo por 4 veces. Esto se debe a que los genes pueden determinar la falla de los folículos para volverse resistentes al acné en la vida adulta temprana4.
#4 Un estudio de adolescentes iraníes encontró que la prevalencia de acné moderado a severo fue del 19,9 % en alumnos con antecedentes familiares de acné, como frente a sólo el 9,8% en aquellos sin antecedentes familiares. El riesgo de gravedad del acné también aumentó con el número de miembros de la familia con antecedentes de acné5.
#5 Un gran estudio de mujeres gemelas encontró que los antecedentes familiares de acné se asociaron significativamente con un mayor riesgo. Los genes explicaron el 81 % de la diferencia en la prevalencia del acné y solo el 19 % se atribuyó a factores ambientales no compartidos, como el estrés6.
#6 Otro estudio encontró que los antecedentes familiares de acné se asocian con la aparición anterior del acné, con más puntos negros y puntos blancos, y con recaídas más frecuentes después de la isotretinoína 7.
#7 Por último, un estudio sobre la influencia de los genes en la producción de sebo encontró que los gemelos idénticos tenían prácticamente las mismas tasas de excreción de sebo, mientras que los gemelos no idénticos tenían tasas diferentes. Pero, tanto los gemelos idénticos como los no idénticos tenían diferentes grados de gravedad del acné. Esto sugiere que, si bien la producción de sebo está bajo control genético, nuestro entorno también tiene un papel que desempeñar en el hecho de que tengamos acné8.
No puedes cambiar tus genes. Pero esto es lo que puedes controlar.
Antes de comenzar a señalar con el dedo a nuestra amada familia, tomemos un momento para enfatizar que tener "genes del acné" no significa que lo obtendrá con seguridad. Si bien sus genes pueden hacer que sea más probable que tenga acné, su entorno y sus hábitos cotidianos también son importantes.
Por ejemplo, el acné puede verse afectado negativamente por ciclos menstruales irregulares, alimentos azucarados, productos lácteos, uso inadecuado de cosméticos, mala calidad del sueño, estrés y más9
Puedes cuidar tu piel cuidándote a ti mismo. Aquí hay una pequeña lista de verificación para ayudarlo a controlar el acné, sin importar sus genes:
- Coma una dieta balanceada con muchas frutas y verduras.
- Dormir de 7 a 9 horas por noche.
- Controle su estrés con yoga, meditación o su forma favorita de relajarse.
- Lávate la cara dos veces al día con un limpiador adecuado para tu tipo de piel.
- Asegúrate de que todo lo que toque tu piel, desde tus dedos hasta tu teléfono, esté limpio.
- Elija productos de calidad, no comedogénicos. Estos son productos que no obstruirán los poros, ¡como Clearly Basics!
Referencias
- U.A. Tan et al., 2018: Una revisión del diagnóstico y tratamiento del acné en pacientes adultas
- Anna Hwee Sing Heng et al., 2020: Revisión sistemática de la epidemiología del acné vulgar
- Christos Petridis et al., 2018: El metanálisis de todo el genoma implica a los mediadores del desarrollo y la morfogénesis del folículo piloso en el riesgo de acné grave
- Goulden et al., 2001: El riesgo familiar de acné adulto: una comparación entre familiares de primer grado de personas afectadas y no afectadas
- S. Zahra Ghodsi et al., 2009: Prevalencia, gravedad y factores de riesgo de gravedad del acné en alumnos de secundaria: un estudio basado en la comunidad
- V Bataille et al., 2002: La influencia de la genética y los factores ambientales en la patogenia del acné: un estudio doble de acné en mujeres
- F Ballanger et al., 2006: Herencia: un factor pronóstico para el acné
- S Walton et al., 1988: Control genético de la excreción de sebo y el acné: un estudio de gemelos
- Jianting Yang et al., 2020: Una revisión de los avances en los factores que influyen en el acné: un énfasis en las características ambientales
Descargo de responsabilidad: Este artículo no debe interpretarse como un consejo médico personal. Para asuntos relacionados con la medicina, consulte a su dermatólogo.
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